Hay momentos en la vida en los que, por los motivos que sean, nos preocupamos menos por nuestra salud de lo que deberíamos. Como es lógico, se trata de momentos peligrosos y que debemos evitar porque, de lo contrario, son numerosos los problemas de salud que pueden aparecer en nuestro cuerpo. En los párrafos que siguen, os vamos a mencionar uno de los problemas de salud que se han convertido en habituales entre las personas que han dejado atrás la adolescencia para convertirse en adultas: hablamos de problemas derivados de una mala salud bucodental.
Cuando una persona termina sus estudios (en cualquiera de sus niveles) y se incorpora al mercado laboral, podemos decir que se ha convertido en adulta. Sus obligaciones pasan a ser otras y sus responsabilidades crecen de un modo exponencial en muy poco tiempo. Pasa a recibir un sueldo que seguramente sea vital para su familia y para la construcción de la vida que quiere. Como consecuencia, aparecen síntomas de estrés ocasionados por la rutina diaria y por el hecho de tener que ir corriendo a todos lados. Y, por ende, se olvida de todo lo que tiene que ver con su salud, incluyendo en ello lo que respecta a su salud dental.
Un artículo publicado por el National Institute of Aging informaba de algunos de los problemas que se pueden ocasionar en nuestra boca si realmente existe una dejadez en lo que respecta al cuidado de nuestra salud bucodental. En el artículo se habla de la caries dental, la enfermedad de las encías, los problemas derivados de la boca seca o el cáncer oral. La verdad es que ninguna de estas cuestiones es ideal para cuidar de la salud de nuestra boca y para vivir con la tranquilidad de que no vamos a tener ningún problema en lo que respecta a una de las zonas más importantes de nuestro cuerpo como lo es esa.
El portal web BBC.com informaba, en una noticia, de que hay una serie de consejos para cuidar de nuestra boca de los que todos deberíamos ser conscientes. En total, son nueve los consejos que se especifican y que son los siguientes:
- La dieta es más importante que el cepillado de los dientes para prevenir la caries.
- El momento en el que comemos también es importante, más que el qué se come.
- Hay que comer bien entre horas: beber agua, comer un poco de queso o un chicle sin azúcar.
- Es precisamente ese azúcar el principal enemigo de los dientes.
- El ácido es otro de los grandes enemigos para todo lo que tiene que ver con nuestra boca.
- Hay que cepillarse después de cada comida, pero lo ideal es no hacerlo inmediatamente después, sino dejar pasar 40 minutos.
- Cepillar diente a diente y no enjuagar la boca al final para mantener el flúor en ellos es la mejor mecánica para cada cepillado.
- Para eliminar el mal aliento, hay que beber agua y consumir vegetales como la zanahoria, el apio o el pepino.
- Finalmente, apostar por una pasta de reconocido prestigio también tiene su importancia, como es lógico.
Los adultos en España, en muchas ocasiones, olvidan la importancia de una salud dental que sí han cuidado cuando han sido niños o adolescentes. Es lógico que no tienen culpa alguna de ello: el estrés y la ansiedad que ocasionan las largas jornadas de trabajo terminan haciendo muy difícil que nos acordemos siempre de todos los cuidados que requiere su boca y dientes. Esto nos lo han comentado desde Gabel Dental, profesionales que han venido trabajando en diferentes estrategias publicitarias que hagan posible que esas personas adultas vuelvan a ser conscientes de la importancia que tiene tener una boca sana y perfectamente cuidada.
Una apuesta que también lo es por la belleza… y la confianza en uno mismo
Cuidar de nuestra boca hace posible que, además de todo lo que hemos venido comentando anteriormente, se potencie todo lo que tiene que ver con nuestra belleza. Es indudable que una sonrisa blanca y cuidada nos vamos a ver de una manera muy diferente delante del espejo. Y eso va a hacer que, al mismo tiempo que nuestra belleza, se potencie la confianza que tenemos en nosotros y nosotras mismas.
Está claro que lo que os hemos comentado en el párrafo anterior va a jugar una importancia muy grande a la hora de hacer posible que tengamos una vida mucho mejor. La confianza en uno o una misma hace que el estrés o la ansiedad que nos provoca el trabajo se reduzca porque sabemos que somos capaces de darle solución a todos los problemas que nos puedan venir. Y pocas cosas hay que sean más importantes que esta en los momentos en los que nos encontramos.