Realmente no puedo entender cómo hay personas que contratan un viaje, hacen la maleta y se van sin más, tan tranquilos, a disfrutar y volver renovados, porque para mí salir de viaje es toda una odisea. Tal vez quienes se van en esas circunstancias son los típicos que contratan todo de una, tipo Viajes El Corte Inglés, pagan una pasta y se lo dan todo hecho. Yo soy más de mover el culo, organizar yo las cosas y acabar tirándome de los pelos, pero ahorrándome un dinero que bien puede servir para cualquier otra cosa. Que a nadie le viene mal tener suelto en los bolsillos ¿o no?
Este verano me propuse hacer un crucero por el Mediterráneo. Me habría encantado hacer un crucero por las Islas Griegas o por los países bálticos, pero el ahorro no llegaba para tanto, y aunque me lo he pasado muy bien, la realidad es que ha sido una auténtica locura.
Para empezar, si te vas de crucero el tiempo que debes programar tiende a ser de más de una semana, normalmente 8 o 9 días como mínimo, lo que implica llevar una buena maleta con ropa y cualquier otra cosa que puedas llegar a necesitar. En mi caso, lo de la maleta de mano no me vale, yo necesitaba facturar para poder llegar a Barcelona en avión, puerto de salida, y todo eran problemas. Que si la maleta pesa más de lo estipulado y debes pagar un plus por cada kilo que te pases, que si esto o lo otro no puede viajar contigo en cabina, que si el perro paga aparte y además, como es grande, viaja solo en bodega, etc. Una auténtica locura que empezó antes de pisar un pie en la calle.
Yo lo único que quería era llegar a Barcelona con mi maleta grande y mi maleta de mano, con mi perro para dejárselo a mi hermana que vive allí y con todo el relax del mundo que pueda tener, pero las aerolíneas no te lo ponen demasiado fácil. Al final tuve que contratar servicios extra que, aun así, me salieron más baratos que haberlo contratado todo en un paquete. La empresa Star-Cargo, con sus departamentos Animales por Avión y Maletas por Avión, transportaron mi equipaje y a mi mascota hasta la puerta de la casa de mi hermana y yo solo tuve que llegar hasta allí con las manos vacías. Eso sí, menudo estrés que gané hasta que encontré solución, ya creía que me quedaba sin viaje y perdiendo el dinero de la reserva.
Excursiones
¿Sabéis que las excursiones se pagan aparte? Creo que hay algunos cruceros que con el “todo incluido” ya meten algunas excursiones pero la gran mayoría no lo hace, así que las debes contratar sobre la marcha pagando una a una en el crucero, lo cual es una auténtica pasta. Yo me negué en rotundo a pagar más de 100 euros por día de excursión y por persona, porque si sumas al final te vas a 800 euros más, como mínimo, de gastos por cabeza. Lo mejor es organizar tu propia visita o buscar agencias locales que hagan tours por la ciudad en tu idioma pues siempre son mucho más baratas que las que organiza el barco.
Por ejemplo, cuando atracamos en Cartagena contrate una excursión de Shore Spain Tours, una de las que anuncian en su web como Cartagena cruise excursions, y pague menos de la mitad. En otras ciudades por las que pasamos, como Nápoles, directamente me organicé mi propia visita a la ciudad, y vi hasta Pompeya. Es muy sencillo, solo hay que tener previsión.
¿Entonces cuál es el problema? Pues básicamente que antes de subir al barco tienes que tener todo muy atado, por lo que eso de contratar y olvidarte es mentira, tienes que organizar, leer, buscar medios de transporte económicos que te lleven a un lado o a otro desde el puerto, reservar entradas para no quedarte en la puerta de museos o espacios que quieras visitar, y todo eso teniendo muy en cuenta el horario porque si el barco zarpa a las 19:00 en punto, tú debes estar embarcado a las 18:30, es un consejo.
La Ropa
Este tema me tiene bastante cabreada porque lo normal es que en un viaje te puedas poner lo que te dé la gana, y si quiero ir todo el día en chándal, pues voy ¿no? Pues si vas en un crucero esto no es así. Hay cenas temáticas en las que debes ir un poco acorde a la situación, y para colmo también se suele organizar la cena de gala con el capitán, donde obviamente tienes que ir de gala, así que en esa maleta en la que no debes meter demasiado peso, debes tener ropa cómoda para todos los días, ropa especial para las cenas temáticas, y ropa de gala para la noche especial. Fácil ¿no? Pues de eso nada.
Y eso sin contar con el calzado porque, lógicamente, no te vas a poner para todo eso las mismas zapatillas.
La pareja que estaba alojada en el camarote de al lado llegó a Barcelona en coche desde Almería, y ahora entiendo por qué: se pegaron una paliza enorme de carretera pero no tuvieron que comerse la cabeza con el equipaje, metieron las maletas que les dio la gana en el maletero del coche y cogieron carretera. El problema es que llegaron tan cansados al barco que el primer día prácticamente se perdieron toda la actividad. De ahí que yo ahora os cuente mis soluciones, igual os vienen mejor que esa del coche.
Conclusión
Si quieres un viaje sencillo y no tiene dinero como para dejar que otros organicen todo por ti, lo mejor es que no vayas de crucero. Puedes ir a ver alguna ciudad unos días, en verano, para que toda la ropa quepa en la maleta de mano o si debes facturar te asegures de no pasar de los kilos permitidos. También puedes ir de camping, sobre todo si llevas perro, porque normalmente pueden ir contigo, lo malo es que ahí, prácticamente, te llevas la casa a cuesta así que igual te toca trabajar más que yéndote de crucero, es cuestión de examinarlo.
¿Y tú viaje de este verano, ha sido tan “cool” como el mío?